La populosa ciudad de Río de Janeiro, situada a orillas del mar y rodeada de montañas, cuenta con magnificas playas y bahías. La Sierra da Carioca divide en dos la ciudad.
Lugares de interés
Dando un paseo por el centro de la ciudad se llega a la plaza Foriano, con sus bares y terrazas. En esta plaza se encuentra el Teatro Municipal, sede de la ópera y la orquesta de Río. También se puede visitar el Museo Nacional de Bellas Artes, situado en la avenida Rio Branco. Resulta interesante el convento de Santo Antonio, en el que se encuentra la iglesia más antigua de la ciudad. Un paseo a lo largo de la Rua da Carioca permite detenerse a comprar en sus tiendas.
Qué hacer
El Museo Nacional está situado en el antiguo palacio de los emperadores del Brasil. Se trata de un museo de historia natural y contiene piezas curiosas como fósiles de dinosaurios o un gran meteorito. El museo de folklore Edson Carneiro presenta muestras de arte popular. Pero si hay algún elemento de la ciudad que no deja de ser visitado por ningún viajero es el Pan de Azúcar. Se puede subir a la cima de esta famosa y curiosa montaña y disfrutar de las espectaculares vistas sobre la bahía de Guanabara.
El parque nacional de Tijuca está situado en la Sierra da Carioca, que divide en dos la ciudad. En él se encuentra el Corcovado, una montaña de unos 700 metros en cuya cima hay una estatua, de unos treinta metros, del Cristo Redentor, que se ha convertido en el símbolo de la ciudad.
Otro elemento que ha hecho famosa la ciudad de Río son sus playas; las más conocidas son la de Flamengo, Botafogo, Copacabana (la más concurrida), Ipanema, y Barra da Tijuca. |