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| Ocaña representa la clásica planta de una villa medieval, de carácter marcadamente agrícola, con grandes calles longitudinales que constituyen una retícula urbana con la confluencia de las demás, en las que pueden verse sus casas solariegas, algunas góticas y renacentistas. Como en toda la provincia de Toledo, Ocaña es ciudad de gran tradición y variedad artesanal, que ha sabido conservar y potenciar. Famosos son de esta villa, por su esmerada fabricación, los célebres botijos blancos. La calidad de los materiales y la finura de la ejecución, sobresalen también en la producción manual de toneles, los trabajos de forja, especialmente rejas, barandillas y objetos ornamentales para puertas. Lugares de interés La Plaza Mayor, de perfecto trazado barroco. El Palacio de los Cárdenas; El Convento de Santo Domingo, del Siglo XVI; La Iglesia de San Juan Bautista, del siglo XII; La Iglesia de Santa María, que en sus orígenes era una antigua mezquita... y muchos otros monumentos. Qué hacer La proximidad de Mora proporciona la ocasión de visitar esta villa para admirar sus célebres alfombras. Y por supuesto, merece la pena visitar Toledo y todas las rutas que existen en su provincia. También en una gran ocasión para degustar la gastronomía toledana en la que destacan los platos de caza -especialmente la perdiz-, el pisto manchego, el cuchifrito de cordero, las truchas, las judías con perdiz, los escabechados, etc. Pero sobre todo Ocaña se distingue por la calidad en la elaboración de los típicos quesos manchegos. |
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